miércoles, 17 de septiembre de 2008

Música sexista


La música y su mensaje

La música es una de las actividades sociales del hombre y aparece relacionada con el surgimiento y desarrollo de la sociedad. Las artes conforman sistemas de comunicación específicos del ser humano que trasmiten una información estética. (...)

La timba y el reguetón como géneros musicales

El auge de la timba y el reguetón, trajo consigo letras semántica y simbólicamente agresivas, para los que lo escuchan, tanto para hombres como para mujeres.

  1. La timba es la combinación de estilos musicales, de tendencias creativas en las que imperan tres fuentes sonoras principales: el jazz, fundamentalmente el latino y el afrocubano; la rumba; y el complejo del son en toda su extensión. (...)
  2. El reguetón es un subgénero que nace de la mezcla técnica del reggae con el rap, en el que se mezclan varios estilos y formas, como la salsa, merengue, cumbia, y últimamente le están adicionando hasta bachata. El reguetón se comienza a escuchar a principios de los 90, en Puerto Rico, aunque unos dicen que es originario de ahí, y otros dicen que nació en Panamá.


La imagen de la mujer en el discurso de cantantes cubanos de timba y reguetón.


De forma general las canciones cubanas de timba y reguetón presentan las siguientes características:


• En el reguetón y la timba se evidencian la alabanza o burla del físico femenino desde la posición de la hegemonía masculina.


• Se estereotipa a la mujer como modelo social. Siempre está presente la fémina que se vende por dinero, o la que traiciona. De esta forma mitifican y dictan pautas conductuales de lo que deben ser las relaciones entre el hombre y la mujer.


• Se hace énfasis en una forma de bailar o de vestir de la mujer que provoque en el hombre placer, solo como un objeto hedónico.


• La mayoría de los discursos de la timba y el reguetón legitiman el tratamiento agresivo a las mujeres. Los vocablos que utilizan los cantantes para nombrar a la mujer no son favorables para ella, (asesina, chamaca, bruja, farandulera, fulana, mentirosa, punto, zorra, fiera, loca, cachorra, perra). Legitiman socialmente un trato ofensivo que dista de las relaciones equitativas entre hombres y mujeres.


• Los video clips tanto internacionales, como los cubanos, generalmente se han constituido en vehículos fundamentales para el reforzamiento y transmisión de la ideología patriarcal de la sociedad, recreando una determinada imagen de la mujer: la pasiva, la objeto-sexual, la que adquiere felicidad al introducirse en la carrera consumista, la que cuyo objetivo fundamental sea agradar al hombre.


• Presentan mujeres bailando alrededor de los cantantes, haciendo énfasis en una forma de bailar y de vestir que provoque en el hombre placer, haciendo planos y encuadres enseñando las partes más vendibles de la mujer, donde el hombre es el centro y la mujer la periferia.


Breves conclusiones: el impacto en los jóvenes


Los jóvenes son los más perjudicados pues en su mayoría consumen esta música de diversas maneras. La música tiene mecanismos psicológicos que influyen en el comportamiento de las personas y fundamentalmente de los jóvenes, porque es el grupo que más lo recibe y con temáticas diferentes que van dirigidas a normas morales, sentimientos, gustos estéticos e intelectuales que coadyuvarán al desarrollo de la personalidad.


Todo lo abordado trae como consecuencia que los jóvenes internalicen pautas de conducta en las colectividades que recrean la estructura patriarcal y la hegemonía masculina, esto se puede evidenciar en la actitud con las mujeres y hombres, las formas de establecer relaciones de pareja, de amigos, y las relaciones de familia. Se mitifican y dictan pautas conductuales de lo que deben ser las relaciones entre el hombre y la mujer y como deben ser cada uno de ellos.


Bibliografía


• Casanellas Cue Liliana. En defensa del texto. Santiago de Cuba. Editorial Oriente, 2004.
• Castro Medel, Osviel. “¿Prohibido el reguetón?”, Juventud Rebelde. La Habana, 13 de febrero de 2005.
• Montoya Hernández, Teresa. ¿Explosión de cerebro? Un acercamiento al reguetón. Trabajo inédito, 2006.
• Montoya Hernández, Teresa. La construcción social de la feminidad a partir del discurso de cantantes cubanos de timba y reguetón. Estudio de caso: la juventud de Moa. Trabajo de diploma. Instituto Superior Minero Metalúrgico de Moa. Facultad de Humanidades, 2007.
La Ventana





El anterior fragmento está sacado de la página web http://www.cubainformacion/. com. Si a alguien le interesa leer el artículo completo, el link es el siguiente:

http://www.cubainformacion.tv/index.php?option=com_content&task=view&id=6277&Itemid=65

Atentamente.

Ali.

1 comentario:

Acaso importa? dijo...

El macho siempre ha tenido superioridad física (únicamente en el sentido "tamaño de musculos y huesos"), ademas de lo que poriamos llamar "ausencia de períodos débiles" (embarazo, regla). No así las mujeres. Esto permitió, de forma violenta como casi siempre és, lo siguiente:

Ayudado por el temor, condicionado por la falta de seguridad, llegó a la opresión (mecanismo de defensa), hasta el punto de creerse, y hacer creer, que realmente el hombre es superior, intelectualmente hablando, pues fisicamente nadie dejó constancia de no creer en el hombre como superior en tal aspecto (por desgracia han hecho falta milenios para que siquiera alguien se plantease el poderío físico femenino, probablemente mayor pero sin duda mejor que el masculino. No me estoy refiriendo a pelear o correr.

Es sobre esta base sobre la que prosperan mitos como el que tu comentabas de la religión (cuyo papel y fin no es discriminar a la mujer, mas se apoya en esto para extender su control público); y esperpentos como la sexualidad actualmente vigente, donde existe un mal (la mujer indecente) que sólo está en la cabeza de quién lo percibe, y por tanto cada uno "decide" (aunque jamás sea de forma propia e independiente) la "maldad" cuantitativamente. Posiblemente peor que este mal es un bien, que justo al contrario que el anterior, a él sólo pueden aspirar los hombres: el bien del triunfador, del que folla, del que folla aún mas, del que cree aprovechar el dia sólo si "se liga" o "convence" a una chica más (el detalle cuantitativo cobra especial relevancia ahora) hasta el punto de que la sentencia "la mayoria de los hombres folla para alimentar su ego" sea de una normalidad abrumadora. Y asi seguirá la sexualidad, mientras los borregos y las borregas sigan viendo en ella algo diferente al perfecto, sano, abrumadoramente común e incluso necesario placer que es follar.

Sin más, agradezco que no generalices, y tengas en cuenta a esos hombres que son afínes a esta idea, entre lo cuales me cuento.